COZUMEL Un caso más de»tortuguismo» y falta de justicia en la Fiscalía General del Estado (FGE), fue denunciado por una madre de familia, quién desde hace mas de un año, su hija de 8 años de edad fue agredida sexualmente por un sujeto de 17 años, y al día de hoy, el presunto agresor goza de impunidad.
La denuncia fue interpuesta el 10 de enero del 2022, y quedó registrada con la carpeta de investigación FGE/QROO/COZ/01/45/2022 por el delito de abuso sexual y/o lo que resulte, en agravio de una menor de 8 años de edad.
De acuerdo con el expediente, el sujeto cuidaba a la niña en una vivienda de la colonia Adolfo López Mateos, y al encontrarse solo con la menor, cometió su fechoría contra la indefensa menor.
Una vez que la madre de familia supo de lo sucedido, acudió a denunciar ante el Ministerio Público de Cozumel; y si bien al principio le recibieron la denuncia, días después, le notificaron que debido que el imputado es menor de edad, el expediente será turnado a la Fiscalía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes (FENNA),en Cancún.
Así pasaron, días, semanas y meses, que le dieron dar varias vueltas de oficina a oficina a la mamá de la víctima, sin que se haga justicia, y dejando al presunto agresor en la impunidad.
En fecha reciente, la madre de familia contactó al fiscal Oscar Montes de Oca, y este su vez, la canalizó con Estela Martínez , quién dijo ser Directora de Atención a Víctimas, pero si el caso es grave y delicado, ahora se complicó más, pues resultó que la carpeta de investigación está «EXTRAVIADA» ya que nadie de FENNA supo dar explicaciones del expediente.
Sin duda, clamar justicia a sido todo un calvario, pues la mamá recordó que tocó varias puertas, incluso al DIF de Cozumel, pero estos tampoco ofrecieron la ayuda idónea, y aseguraron que es trabajo de la FGE la investigación del caso.
Es tan grande el coraje y frustración, que madre e hija se vieron obligadas a salir de la isla, en busca de otro lugar donde vivir más tranquilas, pues aunado a la falta de atención de las autoridades, también empezaron a sufrir acoso por parte de familiares del agresor.
El presunto agresor actualmente tiene 17 años de edad y sigue libre, y debido a la burocracia que impera en la FGE, se teme que el caso quedé impune sin que reciba su castigo por su atroz hecho.
Ojalá que el fiscal Oscar Montes de Oca, se ponga a trabajar y exija resultados favorables a sus subordinados, y se imparta justicia de una vez por todas.
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